miércoles, 6 de julio de 2011

RADIO NACIONAL: PUDO SER UNA TRAGEDIA



Pese a los innumerables reclamos que en materia de seguridad la UTPBA a través de su Comisión Interna en Radio Nacional ha cursado, el viernes 1 de julio de 2011 pudo haber sido un día trágico para un compañero técnico.
De no haberse movido del lugar en donde reparaba una consola en el taller, podría haber sido atravesado por un pedazo de antena que se cortó y atravesó los techos. La antena se estaba instalando en la terraza de la emisora  SIN HABERSE TOMADO LAS MEDIDAS DE PREVENCIÓN NECESARIAS PARA PROTEGER A LOS TRABAJADORES.
Lejos de pretender magnificar un hecho por demás lamentable, la enorme vara de hierro se descolgó desde su lugar de instalación y atravesó varios techos antes de quedar pendiendo a centímetros del piso del citado lugar de trabajo.
Podríamos decir que esta es una muestra más del desprecio de algunas autoridades por la seguridad de sus trabajadores, o que por ahorrar presupuesto no se tomaron las medidas de prevención necesarias para que en caso de un fallo semejante, el hierro quedara colgado y no se desplomara con el riesgo que ello supone. PeroLAS FOTOS HABLAN POR SÍ SOLAS.
Desde hace varias gestiones, la UTPBA en Radio Nacional viene denunciando las enormes irregularidades en materia de seguridad dentro del edificio.
Tratándose de un edificio con antecedentes de muertos por incendios, Radio Nacional sigue sin contar con salida de emergencia y bajo la única puerta de entrada/salida del edificio hay un generador de energía de la empresa EDESUR que en caso de producirse una falla podría arder bajo la única alternativa de salida. En otras palabras, desde hace años venimos diciendo que Maipú 555 es una trampa mortal, a menos que se tomen las precauciones necesarias.
A lo largo de este 2011, la COmisión Interna de la UTPBA acompañó la inspección que realizaron la Superintendencia de Riesgos de Trabajo de la Nación y el responsable de Seguridad de RTA por la Emisora, en la que detectó varias decenas de irregularidades. Y meses más tarde constató junto con la SRT que de las más de 20 recomendaciones que se habían hecho sólo se habían modificado… ¡3! (sí, Tres, Three, Trois, o en el idioma que quieran, pero nada más que 3)
Sigue sin cumplirse el plan de mejoras aacordado con la SRT de la Nación. Acaso los fondos se destionen para otras prioridades que, comparados con la vida de un trabajador, para ciertos funcionarios de Radio Nacional parecen ser más urgentes.
“Pudo ser una tragedia…”, decíanmos al comienzo de esta nota.
Las frases “Nunca pasa nada hasta que pasa”, “El día que pase algo…” “no se puede creer que por ahorrar dos pesos casi maten a un trabajador”, “para esto no se invierte, pero bien que para gastar en pelotudeces son mandados a hacer”, o “qué les va a importar la seguridad si están de paso y vienen solo a hacer noegocios”, entre muchas otras -algunas irreproducibles en este espacio- dan una idea de cómo cayó la noticia entre los trabajadores.
Pareciera que a ciertos funcionarios no les alcanza con las tragedias que, en otros ámbitos y por negligencias similares o mucho menores, han enlutado a nuestra sociedad.